Esta salsa al curry te viene genial saber hacerla si vas a hacer pollo, por ejemplo. Yo la suelo hacer mucho para mezclarla con arroz, que es de las cosas que más se comen en mi casa. Termina dejando un sabor muy rico en la boca y es como si no se necesitara nada más.
Derretir la mantequilla en una cazuela amplia y cómoda, y espolvorearle la harina removiendo constantemente hasta que ésta se dore, aunque con cuidado porque se quema muy fácilmente.
Disolver el cubito de caldo en el agua caliente previamente, antes de añadirlo a la cazuela con la harina. Una vez echado, mezclarlo bien evitado los grumos, que con la harina es difícil.
Por último, añadir a la salsa el curry y las hierbas, y dejarlo cocinarse todo a fuego lento unos 10 minutos.
A la vez que se va haciendo la salsa al curry, se va elaborando el plato con el que se va a servir, que vale la pena tomarla calentita.