La panna cotta, la nata cocida de Piamonte, es un postre muy conocido y una opción popular a la hora de cerrar un almuerzo o una cena con un toque dulce pero a la vez ligero. Esta versión de panna cotta juega con las tradiciones y mezcla la panna cotta italiana con la horchata valenciana, dando lugar a una panna cotta de horchata de sabor original y delicioso. Acompáñala con frutas y chocolate que animen su color blanco puro y disfruta del postre de siempre con un sabor nuevo y estimulante.
Paso 1:
Prepara un recipiente con hielo y agua muy fría. Sumerge las hojas de gelatina y deja que se hidraten completamente durante unos minutos.
Paso 2:
Vierte en un cazo la horchata, la nata y la esencia de vainilla. Remueve con unas varillas para integrarlas. Pon el cazo a fuego medio y espera a que empiece a hervir. Presta mucha atención y retira rápidamente el cazo del fuego cuando esto ocurra (o es muy posible que se desborde).
Paso 3:
Escurre concienzudamente la gelatina hidratada e incorpórala al contenido del cazo. Utiliza las varillas para remover con energía hasta que la gelatina se disuelva.
Paso 4:
Vierte la mezcla en los moldes para panna cotta y llévalos a la nevera durante 6 horas hasta que cuajen.
Presentación:
Desmolda la panna cotta y sírvela en un plato de un color bonito. Siéntete libre de decorarla como más te guste. Nuestra propuesta es muy golosa: siropes de fresa y de chocolate que puedes encontrar en tu tienda DIA, cacahuetes bañados en chocolate negro de la línea Delicious de DIA y delicias de fruta, que son unas gominolas gourmet también de la gama Delicious.
Sugerencia:
La horchata de la línea Delicious de DIA es ligera y sabrosamente dulce. Utilízala para elaborar esta panna cotta y obtener una textura y un sabor superiores.
Alternativas:
Si quieres intensificar el aroma a vainilla de tu panna cotta, en lugar de utilizar unas gotas de esencia adquiere una vaina de vainilla natural, córtala y calienta un pedazo junto a la mezcla de nata y horchata. Retíralo antes de incluir la gelatina.