Desde que a descubrí que a mis hijos les encantan las espinacas con bechamel es un plato que no dejo de hacer, para que así coman de vez en cuando alguna verdura, cosa que les cuesta demasiado. Las suelo poner para acompañar las pechugas de pollo a la plancha, ya que creo que combinados hacen una comida estupenda.
Lo primero que vamos a hacer es poner a pochar muy lentamente la cebolleta en una sartén con un poco de aceite de oliva.
En cuanto veamos que esté muy blandita, le vamos a añadirá a estolas espinacas poco a poco hasta que se pasen.
Con esto hecho, en una cazuela aparte se hace una salsa bechamel ligera.
Cuando tengamos preparada la bechamel, se mezcla está en la sartén con las espinacas y la cebolleta.
Lo servimos en una fuente, espolvoreamos por encima un poco de queso rallado, y las llevamos al horno a gratinar.