Dulce de sandía

El dulce de sandía es uno de mis preferidos. Puede que no sea demasiado conocido pero es uno de los mejores. Si queréis probar una estupendo, os recomiendo que sigáis esta receta.

Procederemos a quitar la cáscara y entonces dejaremos limpia la pulpa de la sandía. Quitaremos todas las pepitas que pueda tener.
Cortaremos ahora en tiras de unos 2 centímetros esa pulpa. Las colocamos en una cacerola enlozada de una dimensión de diámetro que toda la sandía quede en la base.
Encima agregaremos todo el azúcar y lo dejamos reposar.
Al cabo de un rato revolveremos con una cuchara de madera, y veremos como poco a poco se absorberá todo el azúcar.
Cuando esto haya ocurrido lo llevaremos al fuego, en un principio normal, y en cuanto empiece a hacer ebullición, lo bajaremos a mínimo. Entonces vamos a agregar la esencia de vainilla y lo dejamos cocinar a fuego lento durante una media hora.
En ese momento se agrega el bicarbonato, revolviendo para que no levante porque hará efervescencia.
Luego lo mantenemos a fuego lento hasta que se cumpla una hora en total. Lo dejaremos enfriar dentro de la cazuela, para que cuando ya esté a temperatura ambiente, lo podamos envasar y llevarlo a la nevera para que se conserve mejor.
El dulce de sandía nos durara unos 10 días en la nevera, pero si lo conservamos al vacío, nos puede durar hasta meses.