La crema fraiche o crème fraîche, es una crema, parecida a la crema agria solo que con menos materia grasa. Su origen es francés pero con el tiempo se ha extendido al resto de Europa. Se empleado mucho en cocina y, su venta es elevada, ya que no contiene lactosa y por lo tanto para aquellas personas que presentan intolerancia, es perfecta. En la actualidad, la podemos encontrar en todos los supermercados en forma de terrina, solo que yo os voy a contar como elaborarla en casa y así os podéis ahorras un poquito dinero.
En primer lugar, se pone la crema en un cazo y se calienta solo para quitar el frío. Cuando apenas esté tibia, las retiraremos y añadiremos la mantequilla. Removemos.
A continuación, vamos la poner en un vaso de vidrio que tenga tapa y verteremos la crema, la guardaremos cerrada en un ambiente cálido (21ºC) durante 24 horas, pero revolviéndola cada 6 a 8 horas. Luego, y pasadas las 24 horas, revolveremos y la llevaremos a la nevera por 24 horas más para que termine de espesar.
Finalmente y al cabo de ese tiempo, nuestra crema faiche estará lista para usar.
Se puede conservar de 7 a 10 días en la nevera.
¡Lista!