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Leche

La leche, que forma parte de la familia de los lácteos, es el producto generado por las glándulas mamarias de mamíferos, concebido principalmente para alimentar a sus crías. La domesticación de animales, como las vacas, se estima que tuvo lugar hace unos 10,000 años. En aquel entonces, los humanos empezaron a criar animales tanto para obtener carne y pieles como para aprovechar los beneficios que ofrece la leche.

La habilidad para digerir la lactosa, el azúcar presente en la leche, en la edad adulta ha evolucionado en ciertas poblaciones humanas, permitiendo así aprovechar de manera más eficaz los nutrientes de este lácteo. Esta coevolución ha dejado una huella significativa en la historia de la alimentación y la agricultura.

La leche es conocida por su rica composición nutricional. Destaca por alta calidad en proteínas (caseína 80% y aislado de suero 20%), hidratos de carbono (lactosa), grasas y vitaminas A, D y B12. Además, presenta minerales esenciales siendo el más importante el calcio. Dicha combinación de nutrientes hace de la leche un alimento completo.

Curiosidades y consejos sobre la leche:


● Más allá de ser consumida como una bebida o utilizada en la preparación de productos lácteos como quesos y yogures, la leche de vaca desempeña un papel crucial en una amplia gama de recetas dulces y saladas en la cocina internacional.

● La conservación adecuada de la leche de vaca es crucial para mantener su frescura y calidad nutricional. Para prolongar su vida útil, es fundamental refrigerar inmediatamente después de su compra y apertura y almacenarla a una temperatura de aproximadamente 4°C (40°F) en la parte más fría de la nevera.

● Se suele recomendar en el desayuno como bebida pero también se puede añadir en las comidas de tu día a día, como por ejemplo para preparar salsas y cremas, postres, sopas y guisos y en marinados y adobos.

● Otro uso es como aderezo/salsa en preparaciones con pescado azul, reduce mucho el sabor fuerte de este pescado.


Recetas

Requesón casero

Raciones: 4
Precio*: 0,30 €/ración 1,10 €/4 raciones (*precio aproximado, sujeto a variaciones).
Dificultad: fácil.
Tiempo de preparación: 30-40 minutos.

Ingredientes:
● 1 litro de leche entera Dia Láctea.
● Zumo de un limón pequeño.
● Sal al gusto.

Elaboración:
● ¿Te animas a preparar un requesón ideal para añadir a tus desayunos o meriendas?
● Vertemos la leche en una olla y la calentamos a fuego medio hasta que esté caliente pero no hirviendo, removiendo ocasionalmente para evitar que se pegue en el fondo de la olla.
● Una vez que la leche esté caliente, retiramos la olla del fuego y añadimos lentamente el zumo de limón, revolviendo suavemente mientras lo agregamos. Continuamos removiendo la leche durante unos minutos hasta que comience a separarse en pequeños grumos sólidos (requesón) y suero líquido.
● Ponemos un colador sobre un tazón grande y colocamos una gasa o un paño de cocina limpio dentro del colador. Vertemos la mezcla de leche y requesón en el colador, permitiendo que el suero líquido se escurra sobre el tazón. Dejamos que el requesón escurra durante unos 15-20 minutos para que se forme y se vuelva más firme.
● Después de escurrir, recogemos los extremos de la gasa o paño de cocina y exprimimos suavemente con las manos para eliminar el exceso de líquido. Transferimos el requesón a un recipiente y lo refrigeramos durante al menos una hora antes de servir.
● ¡Nuestro requesón casero está listo! Podemos servirlo con miel, frutas frescas, hierbas o como prefiramos.

Trucos y alternativas:
Requesón con hierbas y especias: después de preparar el requesón siguiendo los pasos mencionados, podemos agregar hierbas frescas picadas como tomillo, albahaca o cilantro, así como especias como pimienta negra, pimentón ahumado o ajo en polvo. Simplemente mezclamos las hierbas y especias con el requesón antes de refrigerarlo para darle un sabor extra delicioso y aromático.

Requesón dulce con miel y frutas: si preferimos una versión más dulce del requesón, podemos servirlo con miel y frutas frescas o secas. Probamos con miel de abeja, jarabe de arce o miel de ágave para endulzar y acompañamos con frutas como fresas, moras, melocotones, peras o pasas. Esta combinación es perfecta para un desayuno o merienda saludable y delicioso.

Requesón salado con aceitunas y hierbas: para una versión más salada del requesón, podemos servirlo con aceitunas picadas, hierbas frescas como romero o salvia, y un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Esta opción es ideal como aperitivo o como parte de una tabla de quesos para compartir con amigos y familiares.

Aprovechamiento:
Relleno de pasta o empanadas: podemos aprovechar el requesón casero como relleno para hacer pasta fresca como raviolis, tortellini o canelones. También podemos emplearlo como relleno para empanadas, pasteles o tartas saladas. Mezclamos el requesón con hierbas frescas, espinacas, champiñones u otros ingredientes que tengas a mano para crear deliciosas opciones de comida.

Dip o untable: otra opción para aprovechar el requesón es mezclarlo con hierbas frescas, ajo picado, aceitunas o pimientos asados para crear un dip. Sírvelo con palitos de verduras, galletas saladas o pan tostado integral para un aperitivo fácil y delicioso. También podemos usarlo como aderezo para ensaladas o como relleno para bocadillos y sándwiches.

Esperamos que estos trucos y alternativas os inspiren a experimentar con el requesón casero y a disfrutar de diferentes sabores y combinaciones.



Crema de avena cubana

Raciones: 4.
Precio*: 0,5 €/ración 1,8 €/4 raciones (*precio aproximado, sujeto a variaciones).
Dificultad: fácil.
Tiempo de preparación: 15 minutos.

Ingredientes:
● 100g de copo de avena integral Gran Dia.
● 800ml de leche entera Dia Láctea.
● 5ml de aroma de vainilla (1 cucharadita).
● 1 rama de canela.
● 2-4 clavos de olor (opcional, según preferencia).
● Cáscara de naranja o limón (opcional, para dar sabor adicional).

Elaboración:
● Os presentamos esta receta deliciosa y muy tradicional de la cocina del centro y sur de América.
● En una olla grande, colocamos la leche y la llevamos a fuego medio. Agregamos la avena en hojuelas, la rama de canela y los clavos de olor (si decidimos utilizarlos). También podemos agregar cáscara de naranja o limón para dar mayor aroma y sabor.
● Removemos bien y dejamos que la mezcla hierva a fuego medio-bajo, asegurándonos de remover de vez en cuando para evitar que la avena se pegue al fondo de la olla.
● Continuamos cocinando a fuego lento hasta que la avena esté cocida y tenga una consistencia cremosa y suave (aproximadamente 15-20 minutos).
● Retiramos la rama de canela, los clavos de olor y la cáscara de naranja o limón, si los hemos utilizado. Servimos la avena caliente en tazones individuales si nos apetece una bebida tibia pero también podemos servirla fría si preferimos una bebida refrescante.
● Nuestra recomendación es servirla a temperatura ambiente y acompañada de unos frutos rojos, unas fresas o arándanos, por ejemplo.

Trucos y alternativas:
Avena cubana con frutas frescas: una forma deliciosa de mejorar nuestra receta es agregar frutas frescas cortadas en trozos pequeños, como plátano, fresas, mangos o manzanas. Simplemente agregamos las frutas justo antes de servir la avena caliente o fría. Esto añadirá una explosión de sabor y textura fresca a nuestro desayuno.

Avena con leche de coco: en lugar de utilizar solo leche de vaca, podemos mezclar la leche de vaca con leche de coco para un sabor más exótico y tropical. También le dará a nuestra avena una textura más cremosa y un ligero toque de dulzor natural.

Leche especiada: experimentemos con diferentes especias para darle un toque único a la receta. Por ejemplo, podemos agregar una pizca de canela molida, nuez moscada o cardamomo para añadir un sabor aromático y especiado. También podríamos probar con una pizca de jengibre en polvo para variar el perfil de sabor.

Aprovechamiento :
Si sobra algo de esta rica crema de avena cubana podemos hacer batidos añadiendo a la mezcla frutas frescas o congeladas y un poco de leche para que quede un batido cremoso.

Otra opción es hacer tortitas o crepes, solo tendremos que añadir un huevo y si es necesario un poco más de harina para conseguir la consistencia perfecta de la masa. Cocinamos la masa en una sartén y obtendremos unas ricas tortitas o crepes a las que podemos agregar fruta, chocolate o crema de cacahuete.

Esta receta también se puede utilizar como base para preparar pudín de chía. Mezclamos la receta con semillas de chía en un frasco o tazón. Dejamos reposar en el refrigerador durante la noche para que las semillas de chía absorban el líquido y se forme un pudín espeso. Por la mañana, tendrás un desayuno nutritivo y listo para comer.



Arroz con leche

Raciones: 4
Precio*: 0,50 €/ración 1,80 €/4 raciones (*precio aproximado, sujeto a variaciones).
Dificultad: fácil.
Tiempo de preparación: 40-45 minutos.

Ingredientes:
● 800ml de leche entera Dia Láctea.
● 200g de arroz extra Arrozona de Dia.
● 100g de Dátiles sin hueso Naturmundo de Dia (bien picados, en trocitos muy finos).
● 1 rama de canela.
● Cáscara de limón (opcional).
● Una pizca de sal.

Elaboración:
● Os dejamos esta deliciosa receta tradicional, energética y apetecible de un postre clásico que gustará a todos.
● Empezamos lavando el arroz con agua fría hasta que el agua salga clara, luego lo escurrimos bien. En una olla grande colocamos el arroz, la leche, los dátiles picados, la rama de canela y la cáscara de limón. Agregamos una pizca de sal.
● Llevamos la mezcla a ebullición a fuego medio alto, removiendo ocasionalmente para evitar que el arroz se pegue al fondo de la olla. Es importante remover, se pega o quema con facilidad.
● Una vez que hierva, bajamos el fuego y dejamos que el arroz se cocine a fuego lento durante unos 25-30 minutos, removiendo ocasionalmente hasta que el arroz esté tierno y la mezcla tenga una consistencia cremosa.
● Retiramos la rama de canela y la cáscara de limón si las hemos usado. Servimos el postre caliente o frío, según nuestra preferencia. Si te gusta, puedes añadir un poco de canela en polvo al servir.

Trucos y alternativas:
Podemos utilizar el arroz con leche sobrante para hacer deliciosos postres helados. Simplemente vertemos el arroz con leche en moldes para helados y los congelamos hasta que estén firmes. ¡Obtendremos unos refrescantes y cremosos helados de arroz con leche perfectos para disfrutar en días calurosos!

No olvidemos que en lugar de desechar la cáscara de limón y la rama de canela después de preparar el arroz con leche, podemos aprovecharlas para darle sabor a nuestros platos, nosotros las utilizamos en pescados y carnes al horno para combinar y potenciar los sabores.

Recordemos que esta receta es muy rica en hidratos de carbono, ideales para complementar una comida o cena con vegetales y proteínas o simplemente para endulzar tus desayunos o tentempiés. ¡Disfrútalo!

Aprovechamiento:
Esta receta puede guardarse en la nevera hasta 4 días.

Podemos añadir a la bandeja junto con la carne unas ciruelas pasas u orejones que tengamos en casa para darle un toque dulce.



Contenidos validados por el grupo Nutritional Coaching.